Los organizadores de tres conciertos de Taylor Swift en Viena programados para esta semana los cancelaron el miércoles luego de que las autoridades del país informaron que habían llevado a cabo arrestos en relación con un aparente plan para perpetrar un atentado durante un evento en el área metropolitana de Viena, como los conciertos.
Swift tenía previsto ofrecer sus conciertos en el Estadio Ernst Happel de la capital austriaca el jueves, viernes y sábado como parte de su gira mundial The Eras Tour.
La empresa organizadora del evento, Barracuda Music, informó en una publicación en su cuenta de Instagram el miércoles por la noche que “no tenemos más opción que cancelar los tres conciertos previstos por la seguridad de todos”. Alegó como razón la “confirmación” por parte de funcionarios de un plan para atacar el estadio.
Horas antes el miércoles, las autoridades informaron que habían arrestado a dos presuntos extremistas, uno de los cuales parecía estar planeando un ataque contra un evento en el área metropolitana de Viena, como los conciertos.
El principal sospechoso, de 19 años, fue arrestado en Ternitz, en el sur de Viena, y la segunda persona en la capital austriaca.
Franz Ruf, el director de seguridad pública del Ministerio del Interior, dijo que las autoridades estaban al tanto de “acciones preparatorias” de un posible ataque “y también que había atención por parte del perpetrador de 19 años de edad en los conciertos de Taylor Swift en Viena”, reportó Austria Press Agency.
Ruf dijo que el joven hizo un juramento de lealtad al grupo Estado Islámico.
Se cree que el ciudadano austriaco se radicalizó en internet. Ruf dijo que se aseguraron sustancias químicas y que estaban siendo evaluadas. No dio más detalles.
La cancelación se produjo horas después de que las autoridades dijeran que se reforzarían las medidas de seguridad para los conciertos de Swift. Ruf dijo que, entre otras cosas, se prestará especial atención a los controles de entrada y que los asistentes al concierto deberían planificar llegar con un poco más de tiempo.
A su vez, el jefe de policía de Viena, Gerhard Pürstl, afirmó que si bien se ha minimizado cualquier peligro concreto, un riesgo abstracto justifica aumentar la seguridad.
El canciller austriaco Karl Nehammer dijo en una publicación en la red social X que “la cancelación de los conciertos de Taylor Swift por parte de los organizadores es una amarga decepción para todos los fans en Austria”.
“La situación que rodeó el ataque terrorista aparentemente planeado en Viena era muy grave”, escribió. Pero añadió que, gracias a la intensa cooperación entre la policía, la inteligencia austriaca y extranjera, “la amenaza pudo reconocerse desde el principio, abordarse y evitarse una tragedia”.
Barracuda Music dijo que “todas las entradas se reembolsarán automáticamente dentro de los próximos 10 días hábiles”. El mismo texto se publicó bajo las fechas de Viena en el sitio web oficial de Swift.
Las entradas para los conciertos previstos en el estadio de Viena estaban agotadas, según informó APA, y se estima que 170.000 aficionados asistirían a los conciertos en Austria.
Los fanáticos de Swift recurrieron a las redes sociales para expresar su profunda tristeza por perderse los shows de la superestrella. Algunos de los que publicaron en X lamentaron meses de esfuerzos ahora desperdiciados para hacer pulseras de la amistad y elegir atuendos de moda para la actuación.
Annmarie Timmins, una periodista que viajó desde Estados Unidos para el concierto del jueves, dijo que ella y su esposo estaban esperando el metro después de cenar cuando escucharon la noticia.
“Ni siquiera puedo creerlo”, dijo. “Había una niña con su mamá que parecía muy triste, incluso más que yo. Le regalé una de mis pulseras. Quería abrazarla”.
En 2017, un ataque en un concierto de Ariana Grande en Manchester, Inglaterra, cobró la vida de 22 personas. El atacante suicida Salman Abedi colocó una mochila bomba en la Arena Manchester al final del concierto de Grande cuando miles de jóvenes fans se marchaban. Más de 100 personas resultaron heridas. Abedi murió en la explosión.
Una investigación oficial informó el año pasado que la agencia de inteligencia nacional de Gran Bretaña, MI5, no actuó con suficiente rapidez ante información clave y perdió una oportunidad importante para evitar el atentado, el ataque extremista más mortífero en el Reino Unido en los últimos años.